Decíamos en la entrada anterior que cabía la posibilidad de que el curso de reiki de la Universidad de Lleida no fuera real, sino un modo de aprovecharse de su imagen, pero que en todo caso la Universidad debería tomar cartas en el asunto para evitar ser asociada con prácticas pseudocientíficas. Es lo que ha pasado en el caso de otras dos Universidades, la de Granada y la Politécnica de Cataluña, con el feng-shui.
El Instituto Confucio de la Universidad de Granada es un organismo dedidado fundamentalmente a la difusión de la lengua y cultura chinas.
Para ello, el Instituto organiza diversas actividades, como charlas, conferencias y seminarios. Y precisamente en la sección de actividades de su web podemos encontrar el siguiente anuncio:
No se trata, por supuesto, de un curso universitario, aunque en el anuncio se indique que el seminario se celebrará en el Salón de Grados de la Facultad de Ciencias.
Como ocurre en el caso de la Universidad Politécnica de Cataluña. De nuevo, no es la propia Universidad quien organiza el curso, sino el Círculo de Estudios Orientales. Sin embargo, según el anuncio
el curso se llevará a cabo en las instalaciones de la Universidad, y de hecho la dirección de contacto para las inscripciones es también de la propia Politécnica.
¿Enseñan feng-shui las Universidades de Granada y Politécnica de Cataluña? Realmente no. ¿Hablará alguien de estos cursos y seminarios como si fuesen oficiales? Por supuesto que sí. De hecho, nada menos que el presidente de la Asociación Española de Feng-Shui cuenta en su web que entre los cursos de formación que realiza se encuentra el de la Politécnica de Cataluña:
Lo cual es sin duda un abuso, porque ni los cursos son oficiales ni las Universidades tienen gran cosa que ver con ellos en realidad. Pero las propias Universidades también tienen parte de la culpa de este abuso.
El Feng shui, es una disciplina de 5000 años de historia, el cual engloba gran parte de la cultura y tradición china.
Se basa en los preceptos del I Ching, que es el sentir religioso de millones de personas. Y aunque esté revestida de creencias y supersticiones (porque los chinos son muy supersticiosos) no hay porque criticar que se usen las instalaciones de la Universidad, para impartir unas jornadas.
Creo que no diría usted lo mismo si impartieran cursos de Teología o fuera la Iglesia Católica la promotora de un curso sobre cristianismo.
La opinión sin documentación no deja de ser otro pseudo periodismo revestido de clichés y prejuicios.
«Creo que no diría usted lo mismo si impartieran cursos de Teología o fuera la Iglesia Católica la promotora de un curso sobre cristianismo»
Pues creo que cree usted mal (y que no se ha molestado en echar un vistazo al resto del blog).
La propaganda religiosa estará bien -o no- en los templos, pero no en las Universidades.