Si este dibujito les parece alguna especie de símbolo esotérico, han acertado de pleno. Se trata de un «eneagrama«, un esquema que supuestamente pretende clasificar la personalidad de los individuos, estableciendo nueve tipos de personalidad (los «eneatipos») y las relaciones entre ellos. Y estableciéndolos, además, de una manera nada casual: si se fijan en los trazos rectos tenemos un triángulo conectando los eneatipos 3, 6 y 9; son todos múltiplos de 3, uno de los números místicos por excelencia. De hecho, dividiendo 1 entre 3 obtenemos 0,3333333…, repitiendo infinitamente el bucle representado por el triángulo. Los otros «eneatipos» se conectan entre sí mediante una serie de trazos que siguen la secuencia 1-4-2-8-5-7 (y de ahí otra vez al 1 y vuelta a empezar), y de nuevo nos aparece aquí un número con connotaciones mágicas, el 7: si dividimos 1 entre 7 obtendremos 0,142857142857142857… , es decir, esa secuencia repetida un número infinito de veces.
Por supuesto, ni la personalidad de los seres humanos se corresponde con ningún número místico, ni las relaciones entre las personas tienen que ver con las curiosidades matemáticas a las que la numerología pretende asignar algún significado; todo esto no es más que un capricho del inventor del dibujo, un charlatán llamado George Gurdjieff, y de seguidores suyos como Óscar Ichazo o Claudio Naranjo. Pero esto que quede entre nosotros; para los creyentes en estas cosas el esquema es antiquísimo, y su origen podría estar en la Escuela de Pitágoras, en la antigua Mesopotamia o, incluso, en alguna revelación de unos visitantes extraterrestres de nuestro remoto pasado.
En fin, que esto del eneagrama puede ser muy útil para aprender acerca de las conexiones entre las creencias místicas de ayer y de hoy, la relación entre las corrientes teosóficas del Siglo XIX y la new age de nuestros días, y hasta las muchas chorradas cosas que pueden lograrse jugando un poco con los números. Para lo que no tiene la más mínima utilidad, en cambio, es para la psicología, y sin embargo ahí tenemos nada menos que al Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife programando un Taller de eneagrama:
Taller que por supuesto no va a presentar esto del eneagrama como un ejemplo de ciencia patológica (si es que podemos siquiera calificarlo como «ciencia»), sino como un método superchachipiruli para, como dice el programa, minimizar los defectos y potenciar las virtudes de los asistentes. De hecho, el programa no se corta un pelo e incluye un apartado titulado «beneficios del taller». Aunque en este caso, y recurriendo de nuevo a la numerología, podemos calcularlos con facilidad: los beneficios serán el resultado de multiplicar los 60 euros que cuesta por el número de asistentes. Y sin tener que descontar ni un céntimo por publicidad: como vemos, ya la hace el Colegio gratis et amore…
Actualización: Como puede comprobarse pinchando en el enlace, el Colegio ha tenido el buen criterio de retirar la convocatoria tanto de su web como de su página en Facebook. Como dice el refrán, rectificar es de sabios.
Eliminaron la publicidad, ¿pero eliminaron también el curso? No sé por qué pero lo dudo. Pero bueno, dudo siempre.Salud y saludos.
Lo mejor que he leído nunca sobre "numerologías varias" está en "El péndulo de Foucault" de Umberto Eco. No se pierdan las páginas 247 y 248 de esta versión accesible en pdf: http://galeon.com/pirireis/Foucault.pdfAclara muuuuchas tonterías…
Es un poco trade para comentar ahora, pero sobre eneagramas se siguen haciendo curso en la Universidad de Alicante:http://web.ua.es/es/ice/seminarios/2013/relaciones-interpersonales-en-el-proceso-de-ensenanza-aprendizaje-aplicaciones-del-eneagrama-a-la-docencia.htmlya hicisteis una reseña sobre un curso similar en la UA:http://www.listadelaverguenza.es/2011/12/la-universidad-de-alicante-y-el.html
Sin ánimo de ofender ni molestar, en primer lugar quiero manifestar, que el Eneagrama y todo lo que se mueve alrededor del mismo, nada tiene que ver con la Numerología.
Me gustaría conocer que libros sobre el eneagrama a leído para deducir lo escrito con tanta acritud.
Si fuese tan amable de darme una relación de la bibliografía a la que ha recurrido, podríamos comenzar a dialogar sobre el significado, sentido y utilidad del eneagrama