«Bioneuroemoción» en la Universidad de Alicante

Por Fernando Frías, el 18 noviembre, 2013. Categoría(s): Biodescodificación • bioneuroemoción • General • Universidad de Alicante ✎ 182

Hay que reconocer que el titular es atractivo:

La Universidad de Alicante explica cómo afectan las emociones a la biología humana

Lo que no está a la altura es el contenido, desde luego. Porque lo que cuenta la noticia es que la Universidad alicantina ha programado para el próximo lunes una conferencia sobre «bioneuroemoción»:

La Universidad de Alicante explica cómo afectan las emociones a la biología humana. Actualidad Universitaria

Para los no entendidos (y vamos a suponer, piadosamente, que el hecho de que la Universidad de Alicante haya programado semejante cosa se debe a que sus responsables entran en esa categoría), la «bioneuroemoción» es una mezcla de nada menos que cinco pseudoterapias, cinco:

la PNL (Programación Neurolingüística), La Hipnosis Ericksoniana, El Transgeneracional, El Proyecto Sentido y Los Ciclos Biológicos Memorizados

Y en este momento es cuando algún lector fiel de esta lista levanta la mano y dice «oiga, eso me suena«. Y le suena bien, porque la «bioneuroemoción» no es más que la nueva marca de la «biodescodificación», de la que ya hablamos en su día y que también apareció en esta entrada de Naukas. De hecho, el único cambio visible entre ambos inventos es que la «biodescodificación» es una marca comercial registrada solo en España, mientras que la «bioneuroemoción» está registrada ya a nivel europeo. Por lo demás el nivel charlatanesco es el mismo, el tinglado empresarial es idéntico, y su fundador sigue ocupándose de las labores de marketing, como es el caso de esta charla:

Noticia conferencia La bioneuroemoción y su ámbito de aplicación

 

Es una pena que, según las fuentes de la noticia, las plazas para asistir a la cosa estén agotadas. Y es una pena no ya por el hecho de que haya doscientas personas dispuestas a tragarse estas cosas, muchas de ellas, cabe esperar, creyendo que cuentan con el aval científico de toda una Universidad como la de Alicante; también es una lástima que no quede ningún asiento libre para que alguno de los responsables de programarla se enteren en directo de la barbaridad que están albergando.

Así que vamos a intentar que lo hagan en diferido. Que visiten aquella Alerta magufo de Naukas. Y que lean los comentarios que hizo Marta a aquella vieja entrada de la lista, que les transcribo a continuación. Creo que con estos datos sobra cualquier otro comentario, ¿no?

 

ACERCA DE LA BIONEUROEMOCIÓN

Tengo una amiga que ha hecho el curso CP1 por 1200 euros. A raíz de notar en ella un comportamiento extraño, casi propio de una secta, decidí ahondar en lo que estaba estudiando, y me tropecé con las charlas de Enric Corbera.

La biodescodificación o bioneuroemoción (nombre recientemente acuñado para darle más apariencia científica) conforma toda una filosofía o religión paralela, dentro de la cual se enmarca la propia terapia, y que tiene mucho en común con la “visión cuántica” de Deepak Chopra. Esta religión tiene su propia biblia, que es “Un curso de milagros”, libro escrito por Helen Schucman, a quien se lo dictaba una voz en su cabeza. Supuestamente era agnóstica, pero a los 12 años ya decía haber tenido una experiencia espiritual en Lourdes.

La parte “médica” de la biodescodificación procede de la Nueva Medicina Germánica, inventada por el doctor Ryke Geerd Hamer tras la muerte de su hijo. Este hombre descartó de un plumazo todo lo descubierto sobre patologías y decidió (porque le dio la gana) que el cáncer y cualquier otra enfermedad provenían de conflictos emocionales. Cada conflicto provocaba un círculo visible en el cerebro… visible para él nada más, porque nadie nunca ha podido verlo por sí mismo y dejado constancia de ello. Las metástasis no eran células cancerígenas diseminadas por el cuerpo, eran nuevos tumores causados por el conflicto interno de recibir la noticia del cáncer original. Si queréis leer más sobre Hamer y sobre la pseudocientífica (o inventada) base de la biodescodificación, podéis leerlo aquí, donde lo explican mucho mejor de lo que yo podría hacerlo jamás.

La biodescodificación/bioneuroemoción toma prestados estos principios, con una importante variación: hace falta un diagnóstico médico previo (Corbera no es médico, a diferencia de Hamer) y animan a seguir con el tratamiento de la medicina ortodoxa. Alegan que la biodescodificación no cura (si bien dejan entrever lo contrario en numerosas ocasiones), pero evita que la enfermedad vuelva a surgir (una vez curada por los verdaderos médicos), ya que no hay conflicto que la provoque. De este modo, siguen sacando dinero con la terapia (y charlas, y cursos, etc.), pero se cuidan de acabar en la cárcel, como acabó su antecesor del doctor Hamer. Es un método que no puede fallar: todo el mundo tiene algún conflicto, y sólo tienen que buscarlo o crearlo. Y si no, puede ser un conflicto de tus padres, abuelos, o bisabuelos. Las posibilidades de que haya un conflicto de cualquier tipo en cuatro generaciones es tan grande que la biodescodificación lo tiene fácil. Incluso si no recordaras ningún conflicto, Corbera afirma que tu inconsciente sí lo recuerda o lo “sabe” (el inconsciente lo sabe todo, dicen, aunque fuera cosa de tus abuelos y tú no estuvieras allí), y te hipnotizan para buscarlo. La gente ignora que, hipnotizados o no, la capacidad de crear falsos recuerdos o imaginar cosas que no sucedieron sigue siendo la misma. Otras veces se lo inventan ellos y a ti sólo te queda asentir mansamente, como esta señora. Transcribo parte de la conversación, para quien no quiera ver el vídeo:

MUJER: Enric, me está dando una taquicardia muy fuerte porque mi madre se suicidó… y no puedo…
[…]
CORBERA: ¿Y cómo se suicidó?
M: Se ahorcó, pero no se hizo bien el nudo y se cayó a un barranco (llora) […]
C: Muy bien, cariño […]. Pues ahora mismo estás entrando en catarsis, porque estás comprendiendo que tu madre no hizo nada malo. […] Toma conciencia de eso. […] Muy probablemente, tu madre (muy probablemente, yo no lo sé) igual tenía un conflicto con tu padre, y podía ser un tema de relación entre ellos, podía ser a nivel sexual. ¿Había algún amante, alguna historia?
M: No, mi madre es que, cuando se quedó embarazada de mi hermano, empezó a tener problemas mentales, porque por lo que he oído decir, hubo mucha violencia en su familia –Corbera empieza a asentir, como diciendo “¿veis? ¿veis?”–. Mi abuela tenía un hijo alcohólico que sacaba la navaja y a mi madre se le retiraba la regla cuando venía…
C: ¿Por qué lo sé? –interrumpiendo–. ¿Por qué he podido deducir esto? Por una razón muy simple. Porque la sintomatología física se ha expresado en el corazón. Entonces cuando una mujer, normalmente, manifiesta taquicardias, como has manifestado ahora, son ritmos sexuales no deseados, biológicamente hablando. O fuera de ritmos sexuales. Por eso he deducido que había una historia a nivel de relación sexual. Tú misma lo acabas de decir, había violencia.
M: […] Se me ha quitado la taquicardia.
C. ¡Claro que se te ha quitado la taquicardia! ¡Ya hemos hecho el primer milagro! –bromea… o no.

¿Será así cómo Corbera encuentra los conflictos?

Corbera afirma poseer el don de saber unir muchas teorías en una sola, darles sentido y explicarlas de forma sencilla para que las entienda todo el mundo. Incluso se da el lujo de descalificar a su público, diciéndoles: “Deberíais leer más física cuántica, ¿eh?”. Un chico del público le pregunta por libros para empezar a aprender física cuántica. Corbera afirma que sus nociones las saca de artículos en Internet, luego nombra de pasada algunos nombres (algunos ciertamente recomendables, como Penrose), pero acaba recomendándole un libro pseudocientífico. Mi conclusión, tras escuchar seis o siete de sus charlas, es que no tiene ni idea de física cuántica (aunque adora la palabra “cuántico”), que no entiende ni los experimentos más sencillos; sus deducciones son absurdas y sus explicaciones confusas. No me extraña que afirme que “hay que pensar con las 40000 neuronas del corazón, pues el cerebro tiene tantas que se arma un lío con ellas”. Entiendo que, en su caso, es verdad.

De las charlas que he visto, he reunido una serie de afirmaciones memorables (en Youtube se pueden encontrar todas las charlas de las que he extraído dichas afirmaciones). Algunas de ellas son refutables de forma simple, con sólo una búsqueda crítica y contrastada usando vuestro buscador de Internet favorito y accediendo a las fuentes de las afirmaciones. Otras quizá no son tan fácilmente refutables, pero son muy cuestionables. Son sólo un pequeño ejemplo. Las dejo aquí, por si a alguien le interesan. Las separo en dos grupos: las afirmaciones que tienen una refutación directa y las que son, en el mejor de los casos, muy dudosas.

 

Afirmaciones obvia y/o objetivamente erróneas.

Comienzo con una serie de aseveraciones hechas por Corbera en sus charlas, seguida de una o varias fuentes que la refutan sin dejar lugar a discusión alguna. En muchas de ellas os indico un enlace al punto de sus charlas en el que lo afirma; en otras, sinceramente, me he aburrido y os dejo a vosotros, si lo deseáis, la tarea.

NO EXISTE EL CÁNCER DE CORAZÓNSí existe.

LOS LOCOS NO TIENEN CÁNCER. Aunque deja a discreción del oyente la definición de “loco”, lo asumo como “problemas mentales”. Afirma literalmente que alguien tenía un cáncer, y al día siguiente se volvió loco y se le pasó (desde luego, no es el culmen de la concreción). En cualquier caso, la gente con problemas mentales sí pueden padecer cáncer:
– El cáncer es la segunda causa de muerte en pacientes con esquizofrenia (2009).
El Alzheimer interfiere en el tratamiento del cáncer.
Los pacientes de cáncer en edad avanzada pueden sufrir tanto de demencia como de delirio.

SI FUMAS PENSANDO QUE TE ESTÁS FUMANDO A DIOS, NO TE PASARÁ NADA. Quizá una de las afirmaciones más peligrosas de Enric Corbera. ¿De verdad este tipo sabe algo de biología? La química que contiene un cigarrillo poco tiene que ver con Dios, exista o no. Afirmar esto casi me parece un asesinato premeditado, porque está induciendo a la gente que le escucha y cree en él a fumar pensando que es inocuo si enfocan sus pensamientos en una determinada dirección, sin ningún tipo de fundamento basado en la evidencia científica (o más bien, contra todos los fundamentos existentes).

EL CORAZÓN TIENE 40.000 NEURONAS Y PUEDES PENSAR CON ELLAS. (Explicación más general en este vídeo ). El corazón tiene terminaciones nerviosas simpáticas y parasimpáticas (que aceleran o calman el ritmo cardíaco, respectivamente). Pero su función es únicamente modificar a conveniencia el ritmo del corazón, no pensar. La fuente más fiable que he encontrado, muy lejos de ser la de HeartMath, es esta, en inglés.
El tema en cuestión fue la base de un ilustrativo debate en el apartado de comentarios de este artículo de Naukas sobre biodescodificación.

EN UN CORAZÓN COHERENTE LAS PULSACIONES NO VARÍAN, AL CONTRARIO QUE EN UNO CON EMOCIONES NEGATIVAS. La exposición completa dice textualmente: “Cuando experimentamos una emoción (por ejemplo, de frustración), nuestro ritmo cardíaco se altera aunque aparentemente no se altera. O sea, un médico no lo vería porque ellos estudian la “variabilidad” de las pulsaciones, de los latidos del corazón. Mientras que un corazón con coherencia, el latido del corazón, la curva es “limpia” [hace gestos sinusoidales con la mano], cuando hay una emoción (vamos a llamarle negativa), la curva tiene arrugas.” Esta estrafalaria afirmación proveniente del HeartMath está íntimamente ligada con la posibilidad de compra de un artículo que supuestamente mide dichas alteraciones para descubrir si tu corazón está “en coherencia”, por el módico precio de 99$. Cualquiera que se haya sometido a un electrocardiograma habrá sido testigo de que difícilmente un médico podría no ver un parámetro cualquiera en una exploración del corazón ¡incluso sin su extraordinariamente caro pulsómetro!

CUANDO LA MENTE NO ESCUCHA AL CORAZÓN, ÉSTE PIERDE SU CAMPO MAGNÉTICO. Incluso concediendo en un ataque de credulidad que pudiera existir dicha relación entre órganos, esto es evidentemente falso. Si tu corazón pierde su campo magnético es porque ha dejado de latir y ya estarías muerto. Biológicamente muerto. No “dormido” ni “desconectado de la realidad”.

EL CAMPO MAGNÉTICO DEL CORAZÓN PUEDE ABARCAR KILÓMETROS. La afirmación no tiene desperdicio: “Hay la hipótesis, la certeza, de que el campo magnético puede abarcar kilómetros, pero todavía no han encontrado los aparatos para medirlo”. En mi planeta, la certeza de una afirmación viene a raíz de la evidencia empírica mediante su medición (en este caso, bastaría con un gaussímetro para medir campos magnéticos). Si se hubiera quedado en “la hipótesis” sería perdonable, aunque haría perder la apariencia de certeza del resto de las afirmaciones que promulga.

EL CAMPO MAGNÉTICO DEL CORAZÓN INFLUYE EN EL CAMPO MAGNÉTICO DE LA TIERRA. Corbera afirma que, sobre las ciudades, se han descubierto bolsas de campos magnéticos mayores de lo normal, y que “se sabe” que se deben al campo magnético del corazón de la gente que vive en las ciudades. Vamos a suponer (que es mucho suponer) que existen esas “bolsas”. Añado unas notas:
El campo eléctrico del corazón es 0.0017V/m.
El de la médula ósea, 0.0019V/m.
El de una nevera, 120V/m.
El de un secador de pelo, tostadora o televisor en color 80V/m.
El de una bombilla 5V/m.
Por lo tanto, suponiendo que fuese verdad lo que afirma Corbera, se me ocurren muchas otras causas que no son “nuestra conciencia” para que existan esas “bolsas” sobre las ciudades.
Afirma que esto se demostró el 11-S: cuando cayeron las torres, dice, pasaban por allí casualmente los satélites que miden el campo magnético y descubrieron que, de pronto, crecía muchísimo. Y era, según él, por la angustia de la gente. Por más que he intentado encontrar la fuente, incluso en páginas conspiranoicas, no he encontrado el supuesto estudio de tan importante descubrimiento.

LOS POLOS SE ESTÁN DERRITIENDO POR LAS VARIACIONES DEL CAMPO MAGNÉTICO DE LA TIERRA. Entre las causas reales detectadas actualmente, dicho nivel de hielo depende de factores como el agujero de la capa de ozono, las corrientes marinas o la humedad (hay muchas otras, es un proceso complejo). Ninguna de estas causas tiene que ver con el electromagnetismo.

LOS POLOS MAGNÉTICOS DE LA TIERRA SE ESTÁN ALTERANDO POR EL CAMBIO MAGNÉTICO DEL CORAZÓN. Según Corbera, esta afirmación está extraída del supuesto instituto HeartMath, que por lo visto debe dedicarse también a la geología. Dado que él mismo afirma que esto ha sucedido muchas veces a lo largo de la historia de la Tierra (variaciones de las que, efectivamente, queda un registro en las rocas con componentes ferromagnéticos), hace evidente que es un fenómeno que sucede sin requerir de intervención humana (ni de ningún otro ser vivo) alguna. En este caso ni siquiera se hace necesario recurrir a ninguna bibliografía que nos introduzca a la apasionante estructura interna del planeta y su generación de electromagnetismo.

EL EXPERIMENTO DE LOS MONOS Y LA CREACIÓN DE UN PARADIGMA. El experimento que explica aquí es un experimento muy fácil de explicar, pero aún así lo explica mal. Corbera dice que al mono que mojan con agua es al que sube la escalera y que, cuando llega uno nuevo, los otros le “comen la cabeza”. Lo podéis leer correctamente aquí. Aunque la conclusión es, en efecto, la misma, resulta chocante que el señor Corbera haya entendido mal incluso un experimento tan simple como este. Va a ser verdad no sólo que cuando era niño no entendía las cosas (como cuenta en una de sus charlas), sino que sigue sin entenderlas.

CUANDO LA GENTE MEDITA, BAJAN LOS ASESINATOS EN NUEVA YORK, PERO ESO NO SIRVE PORQUE A LA SEMANA SIGUIENTE VUELVEN A SUBIR PARA COMPENSAR (también aquí). Corbera no ha oído hablar de la regresión a la normalidad en las estadísticas, de la falacia correlación/causación, ni en general de cómo llevar a cabo un ensayo metodológicamente válido.

SI TOMAS CONCIENCIA, PUEDES CAMBIAR TU ADN. El señor Corbera nos habla de la epigenética y nos dice que el estrés de nuestros padres antes de nuestro nacimiento nos marcará para siempre, y que sólo nos curaremos si tomamos conciencia. En realidad, al parecer se puede revertir su efecto con la dieta (y esto sí que es biología). Copio: “Una forma de controlar el grado de metilación es por medio de acción de efectos ambientales. En los mamíferos se ha visto que la metionina, la colina, el ácido fólico y las piridoxinas (que son sustancias provenientes de la dieta) tienen como función la adición de grupos metilos“. Los metilos son los que silencian los genes. Podéis leerlo aquí.

NUNCA DEBÉIS SENTIROS CULPABLES. Esta doble moral de la biodescodificación es execrable. Afirma que no hay que sentirse culpable, que la culpa crea enfermedades… pero nos conmina a asumir que somos culpables de nuestra enfermedad, dado que no hemos sabido resolver algún conflicto, nuestro o de nuestros antepasados, o bien no somos personas coherentes que siguen a su corazón, sino que pensamos con el cerebro. Y somos culpables de cualquier, repito, cualquier enfermedad que puedan coger nuestros hijos pequeños, antes de los 7 años, dado que (siempre según él) los niños no se ponen enfermos, los ponemos enfermos. Y si morimos, iremos a la tumba conscientes de que somos gilipollas, porque (sic) “no se mueren los buenos, se mueren los gilipollas” (también aquí). O sea, que si ya es bastante injusto para nosotros estar enfermos o tener a un hijo enfermo (o a un animal), nos echa encima la carga de ser culpables de esas enfermedades. Vergonzoso.

POR EL PRINCIPIO DE HEISENBERG, TENEMOS UN 1% DE LIBRE ALBEDRÍO. Añadiéndole un importante trasfondo antropocéntrico voluntario al principio físico de indeterminación de Heisenberg defendería, si acaso, justo lo contrario, como la propia palabra “indeterminación” indica.

EXPOSICIÓN DEL EXPERIMENTO DE LA DOBLE RENDIJA. La explicación del experimento, tal como la explica en su charla Conciencia Total, no tiene sentido: si hay dos observadores, uno a cada lado de la “pantalla” de recepción de partículas (cosa que el experimento original no presenta), el de un lado verá el patrón de interferencia y el otro las partículas discretas. Una exposición mucho más acertada del experimento habría sido esta otra.
De todas formas, la imposibilidad de predecir dónde está el electrón a la vez que su velocidad no es tanto de observación (ni mucho menos de la presencia o no de un ser “consciente”) como de matemáticas. Sin pretender profundizar en su compleja teoría, matemáticamente no es posible conocer ambas magnitudes a la vez. Y tampoco son necesariamente estas dos magnitudes las que no se pueden conocer simultáneamente. Pueden ser otros pares de magnitudes independientemente de que sean o no observadas. Porque lo que dice el principio es: “Hay determinados pares de magnitudes físicas que no están determinadas con total precisión simultáneamente”.
Y desde luego, la conclusión de este experimento no es, de ningún modo, que el tiempo no existe, como de alguna manera infiere Corbera, sino que el electrón se comporta unas veces como onda, y otras como partícula, con su imposibilidad intrínseca de medición simultánea de ciertos pares de propiedades que postula el Principio de Heisenberg.

EL YO CUÁNTICO VIVE EN TIEMPO ACELERADO. Corbera afirma que tenemos un doble cuántico que viaja por ahí en forma de onda. Como vive, según él, en tiempo acelerado al viajar a la velocidad de la luz (por ser onda de energía), podemos pedirle consejo sobre nuestra vida porque, lo que sea que estemos viviendo, él ya lo habrá vivido (dado que vive en ese tiempo acelerado). Corbera no sabe que, si hubiera de verdad un doble cuántico en forma de onda, si esta onda se moviera a la velocidad de la luz, su tiempo no estará acelerado, sino ralentizado. Ese “yo cuántico” tendría que ser quien preguntase al “yo terrenal” cómo solucionar sus problemas y no al revés, pues su tiempo transcurre mucho más lento. Para más información, recomiendo consultar la paradoja de los gemelos de Einstein.

EL TIEMPO NO EXISTE/ EL TIEMPO EXISTE Y ES LINEAL. El señor Corbera es incoherente consigo mismo. Lo primero lo dice en la charla “El despertar de la conciencia y el ADN” (parte 1); lo segundo en el “Curso de Milagros”.

NO HAY QUE DEJAR DE TOMAR LA MEDICACIÓN, O UN PRODUCTO CUÁNTICO, O IR A LOURDES. Sobran los comentarios.

 

Afirmaciones no tan obviamente erróneas, pero muy cuestionables.

Este apartado entronca algunos temas que, pese a no tener una contra-argumentación tan evidente como en el apartado anterior, carecen a su vez de una argumentación sólida o contienen un alto grado de dependencia de unas premisas sin una base objetiva que los sustenten, pero que Corbera promulga como ciertos y probados.

NO TRATÉIS DE AYUDAR A LOS DEMÁS: ELLOS TIENEN SUS PROGRAMAS. La biodescodificación/bioneuroemoción enseña a ignorar olímpicamente al prójimo sólo porque ellos “tienen sus programas”. Llama “paranoia” a intentar ayudar. Sin embargo, el señor Corbera se atribuye el derecho de influir en nosotros para “cambiar su realidad”. Dicen que el que hace la ley hace la trampa. Así que podemos hacer lo mismo e influir (o al menos intentarlo) en quien nos dé la gana con la bendición de la bioneuroemoción siempre y cuando tengamos claro que es para cambiar nuestra realidad.

LOS CAMPOS MÓRFICOS. ¿Habéis probado a aprender chino? Debería resultar extremadamente fácil aprenderlo, dado que es uno de los idiomas más hablados del mundo. La hipótesis de los campos mórficos, de Rupert Sheldrake, no ha sido demostrada y los experimentos que este afirma haber realizado con resultados positivos no han sido revisados ni reproducidos por colegas científicos, con lo cual no puede considerarse válida. Pero eso no detiene a la pseudociencia.

LOS NIÑOS NO SE PONEN ENFERMOS: LOS PONEMOS ENFERMOS. Ignoremos por un segundo todo lo que la medicina nos aporta en este campo. Según el postulado, si mi niño está en la guardería y todos los demás niños están enfermos de gripe menos el mío, quiere decir que yo tengo una familia modelo. Y si mi niño cae también, entonces tengo un conflicto con mi pareja. Aunque yo no crea/sepa/recuerde que lo tengo, forzosamente lo tengo que tener (o mis padres, o abuelos, etc.).

EL EJEMPLO DE LA MUJER MALTRATADA. El señor Corbera, en su candidez, afirma que una mujer maltratada que sigue a su corazón se aleja de su pareja. Podemos argumentar exactamente lo contrario. Una mujer maltratada lo único que hace es sentir: siente miedo, compasión, quizá amor enfermizo o desprecio por sí misma. Todo esto son sentimientos. La única forma de separarse de su pareja es disociar la mente de los sentimientos y decir: “me da igual cómo me sienta ahora, sé que en el futuro me sentiré mejor”. E irse, sienta lo que sienta. El señor Corbera parece que no sabe diferenciar lo que es un sentimiento de un pensamiento. Lo disfraza diciendo: “tú estás con él porque no te quieres nada”. Habla de desprecio hacia sí misma, pero lo esquiva. El desprecio hacia sí misma llevaría a la mujer al suicidio si “siguiera a su corazón”. Sólo una mente activa y despierta, capaz de desafiar a un sentimiento (“corazón”) enfermo , puede salir de esa situación.

LA ENFERMEDAD PROVIENE DE UN CONFLICTO EMOCIONAL. Y si no es tuyo, es de tu madre, o de tu padre, o de tu hermano, o de tus abuelos, o de tus bisabuelos, tíos, tíos abuelos… Esta afirmación es como la de la existencia de Dios, porque es irrefutable. Nunca existirá un entorno o ancestros sin un solo conflicto. Encontrarás algo siempre y le achacarás tu enfermedad a eso, independientemente de si está relacionado o no. Así cualquiera puede formarse sus “teorías” para engañar a la gente. Por otra parte, si no te curas tras haber cambiado tus creencias, es que lo has hecho mal. Y así no hay forma de que falle. Irrefutable.

SI TE MUERES, ES PORQUE UNA PARTE DE TI QUIERE MORIRSE. ¿A quién le apetece morirse hoy? Que levante la mano. ¿Nadie? Sigamos.

UNA PERSONA CON CÁNCER ES UNA PERSONA DESCONECTADA DE LA REALIDAD. No he visto ningún ejemplo más claro que Carl Sagan para refutar esto. Tenía cáncer. También tenía una familia feliz, era científico, agnóstico, y muy conectado al mundo que le rodeaba. Ah, pero seguro que tenía algún conflicto, porque el señor Corbera asegura que alguien en su situación tenía que tenerlo. Seguramente debieron violar a su madre o abuela, o algo.

LA MUERTE NO EXISTE. El señor Corbera, siendo incoherente de nuevo (¿se está ganando un cáncer?). Una chica en el público se lo hace notar. ¿Su respuesta? “Tú calla”

 

Conclusión.

Mi opinión es que la bioneuroemoción no sólo es medicina «integrativa», como a él le gusta llamarla, sino que cumple bastantes características de secta, como evitar a las personas «no despiertas», considerarse mejores que los demás por «ser coherentes» y estar «despiertos», lucrarse con el tema y hacer labor proselitista, afirmando además, sin tapujos, al principio del “curso de milagros”, que “nos va a lavar el cerebro”. Ha conseguido meterse ya en las universidades de Cuba y Perú, pero no por ello dejo de considerarlo secta. No obstante, esto es un criterio puramente personal que no pretendo someter a debate. Dejemos que las propuestas anteriores y sus críticas hablen por sí mismas y que el lector (al que agradezco su esfuerzo si ha llegado hasta aquí) saque sus propias conclusiones.

Por otra parte, creo haber aportado pruebas suficientes de que hay que tomar con muchas reservas lo que dice este señor, ya que mucha de la información que proporciona es directamente falsa, o no demostrada o no demostrable.

Finalmente, añadir que hay premisas de la biodescodificación que son rescatables. Tiene un componente psicológico bastante interesante, que consiste en creer que tus pensamientos influyen en cómo te va en la vida, y que si mejoras aquellos, esta mejorará a la par. No está tan mal, pero este tema se puede leer en montones de libros de autoayuda sin necesidad de impregnarlo de pseudociencia y pseudoreligión.
Sin embargo, este último punto, beneficioso en cierto grado, queda contaminado por la culpabilidad que te hacen asumir por estar enfermo, tú o algún ser querido. Para mí, personalmente, esto es imperdonable.



182 Comentarios

  1. Hola, parece que la conversación dio mucho de sí, aunque ahora mismo parece agotada.
    Comienzo en breve un programa de radio, que pretende ser veraz, sobre todo, validando dicha veracidad desde el punto de vista del método científico. Yo soy psicólogo y muy vinculado a la ciencia. Me ha surgido esta temática para el programa y buscando información he llegado aquí.
    Me parece muy interesante todas las respuesta que he podido leer en referencia, a este digamos «movimiento» de seguidores de la bioneuroemoción.
    Tan solo , si me lo permitís y sin la pretensión de despertar de nuevo el debate (como psicólogo yo ya tengo muy claro de que lado estoy), me gustaría dejar un apunte que considero importante y que he echado en falta en la gran parte del debate que he podido leer, por si alguien quiere de verdad informarse acerca de como influyen las emociones en el funcionamiento del organismo, pero de un modo más veraz y científico. Imagino, por lo que he podido leer por vuestra parte, que algunos de vosotros ya conoceréis esta definición. Para los demás, tan solo hay que escribir en el buscador «psiconeuroinmunoendocrinología» y podrán informarse desde un punto de vista psicológico y neuro-endocrino, acerca de como la conexión de estos tres factores pueden influir en el sistema inmune y viceversa, sin entrar en cuestiones místico-religiosas.

    1. Como me dijo un científico que precisamente trabaja en ese campo, el noventa por ciento de lo que aparece en internet bajo esa etiqueta es pura charlatanería, y si además lo ofrecen como una terapia en lugar de explicar que es un campo de estudio aún en desarrollo, lo elevaba al 99%, dejando al 1% restante en cuarentena. En ese, como en muchos otros campos novedosos, escribir algo en el buscador casi garantiza que tropecemos con datos erróneos y/o falsos.

      Por otra parte, de estudiar la influencia psicológica en el sistema inmunológico a aceptar los disparates de Hamer, Corbera y otros estafadores hay un abismo, y los investigadores serios deberían ser muy cuidadosos a la hora de marcar bien esa diferencia.

Deja un comentario

Por Fernando Frías, publicado el 18 noviembre, 2013
Categoría(s): Biodescodificación • bioneuroemoción • General • Universidad de Alicante